Cuando regresamos al Perito
Moreno decidimos ir a visitar el Glaciar Perito Moreno. La verdad es que
teníamos apenas un día para hacerlo. Contratamos una excursión en autobús desde
Puerto Natales y, la verdad, fue un error. El glaciar se encuentra a unos 350
kilómetros de Puerto Natales, pero el trayecto se hacer eterno. Además, se debe
pasar el puesto fronterizo y siempre se producen retrasos. Estos, para más
complicación, cierran por la noche. De hecho, cuando volvíamos encontramos el
puesto cerrado y tuvimos que ir a otro paso más lejano, creo que en Rio Turbio,
que lo hacía más tarde.

En fin, el resultado fue un día
pasado prácticamente en el autobús para estar unas horas viendo el glaciar. Lo
más sensato, sin duda, hubiese sido cruzar la frontera en autobús, pasar un día
en El Calafate –la población tiene, además, una animada vida enfocada al
turista– y visitar tranquilamente el Perito Moreno. Pero no disponíamos de
tiempo.

El viaje fue muy pesado. Recuerdo
ver pasar kilómetro tras kilómetro de estepa por la ventanilla, mientras el
conductor bebía mate que le cebaba el guía y escuchaba una y otra vez un mismo
casete. No sé el motivo, si tenían solo uno o algún tipo de fijación, pero ponían
el mismo una y otra vez sin descanso.

El glaciar es maravilloso. Lo vimos desde unos
barcos que se acercan al mismo y también desde el mirador. Hay excursiones para
recorrer un pequeño tramo del glaciar a pié. Hubiese estado bien, pero como
dije, el avión nos esperaba el día siguiente
y no pudimos hacer mucho más.